En la segunda parte de su viaje a El Hierro, el presentador de BR Schmidt Max no sólo experimenta nuevas aventuras de buceo con el entrenador de apnea Karsten Mohr, sino que también descubre la diversidad culinaria, el pasado volcánico y la magia de esta pequeña y salvaje isla al borde de Europa.
Aquí está la segunda parte del 12 de diciembre de 2019:
Viaje de descubrimiento por las Islas Canarias: El Hierro sobre y bajo el agua (2/2) | freizeit | BR
Aquí tienes el enlace al programa en la mediateca de ARD (en alemán):
Paz, profundidad y sabor: buceo en apnea y vida insular con Karsten Mohr (resumen del programa generado por la IA)
A mar abierto
Tras los primeros ejercicios de respiración, Max se dirige al Atlántico. Bajo la guía de Karsten, aprende a conectar con el elemento agua, con compostura, técnica y confianza en su propio cuerpo. Karsten explica las maravillas fisiológicas que tienen lugar en el cuerpo: Desde el reflejo de inmersión hasta la reacción del bazo, pasando por la economía de oxígeno: el organismo humano está perfectamente preparado para el buceo en apnea.
«Nuestro cuerpo sabe lo que tiene que hacer, si dejamos de molestarle».
Sabor isleño y auténtica artesanía
Tras la zambullida, tu estómago también puede darse un chapuzón: Hay quesadillas de El Hierro, un dulce de queso preparado con cariño por Carmen y Andrés, que son la segunda generación que hornea la receta familiar. Como tantas cosas en El Hierro, esto es local, honesto y tiene historia.
Más tarde, nos dirigimos al restaurante El Refugio, en La Restinga: alfonsinos y serviolas recién pescados, preparados únicamente con aceite y sal. Karsten subraya que aquí sólo utilizan cañas y redes de pesca, sin redes de arrastre ni destrucción. El Hierro demuestra que la pesca sostenible funciona, y es deliciosa.
El volcán bajo tus pies
Karsten lleva a Max al museo del volcán, donde aprenden más sobre la enorme erupción submarina de 2011, a pocos kilómetros de la costa. Azufre, lava, evacuaciones. El mundo submarino sufrió, y se regeneró con sorprendente rapidez. Hoy, la zona está considerada una de las mejores zonas de buceo del mundo.
El descanso es la clave
Para Karsten, la apnea no es un deporte, sino una actitud interior:
«No es la adrenalina lo que te lleva a las profundidades, sino la devoción».
En una tranquila bahía de Tacorón, le muestra a Max un lugar especial: un arco de roca inundado de luz bajo el agua, por el que se sumergen juntos. Un momento lleno de claridad y un sentimiento de infancia para Max:
«Estaba completamente tranquila, completamente conmigo misma. Casi como antes: simplemente abajo, sin pensar».
Desconectar, repostar, maravillarse
El Hierro tiene un efecto, incluso en tierra. En una excursión a través de zonas de vegetación cambiante, Max descubre el lado espiritual de la isla: bosques de hadas, caminos de peregrinos, musgo brumoso y, finalmente, el «árbol sagrado» Garoé, que solía proporcionar agua donde no había manantiales.
«La isla te derriba. Así, sin más. Y de repente entiendes por qué Karsten se quedó aquí».
Conclusión: la apnea es algo más que aguantar la respiración: es una forma de vida
Con su curso, Karsten Mohr demuestra que la profundidad no se crea mediante la actuación, sino mediante la confianza, la presencia y el dejarse llevar. El Hierro -rugoso, poderoso y tranquilo al mismo tiempo- ofrece el entorno perfecto para ello. ¿Y Schmidt Max? Da las gracias. Y se sumerge una vez más.